Solo faltó para que viera los mejores conciertos de mi vida para darme cuenta de lo timida que es mi guitarra. Claro es una comparación un tanto exagerable, pero sin duda es cierto. Y como no darme cuenta si el dia viernes cuando llegué a casa, dejé mis cosas en la cama, me relajé y prendí el equipo, despúes de un rato viendo los mejores conciertos de rock de la historia me empezé a fijar detalladamente en las guitarras y especialmente en lo que causaban. Fue inspirador y a la vez desilusionante, ver que tan solo jimi hendrix con una guitarra y un sonido ensordecedor ( en ese momento excitante) hacía gritar y saltar a todo woodstock, considerando que en ese festival ( el más grande de la historia) habían cerca de quinientas mil personas. Fue desilusionante solo para mí en ese momento, ya que mi guitarra con suerte suena fuerte solo en mi pieza y todavia no lográ extasiar a alguien con su sonido ( eso no quiere decir que algún dia no lo logre). Y lo mejor fue que me puse a mirar un concierto de Pink floyd en los "canales" de Venecia y fue suficiente para inspirarme en lograr que mi guitarra logre un sonido mas placentero y que satisfaga mis oidos, por lo que al día siguiente fuì a la tienda Fender y me compré un juego de amplificación. Ahora por lo menos los vecinos me reclaman por lo fuerte que suena la guitarra, el siguiente paso es hacer música y llegar a Venecia.
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